ENCUENTROS NOCTURNOS

            La ciudad de Oviedo vivió en agosto de 1921 un acontecimiento excepcional para la época: la celebración de encuentros de fútbol nocturnos, algo sin precedentes en aquellos tiempos. La Cooperativa de Empleados Obreros de Gas y Electricidad de la S.P.O. (Sociedad Popular Ovetense) iba a ser la beneficiaria, con el objetivo de construir casas baratas.

            El campo de Teatinos —sede del Deportivo de Oviedo, el equipo considerado "rico" de la ciudad— iba a ser el escenario, si bien jugarían frente a los invitados de la Selección Vasca tanto los propietarios del terreno como su gran rival local, el R. Stadium.

            La expectación creada fue enorme, consecuencia de lo insólito del evento, si bien tras presentar el campo en el primero de los partidos jugado el 5 de agosto una excelente entrada, su aspecto 48 horas más tarde para el segundo sería bastante peor. Los encuentros se programaron para las diez y las diez y cuarto de la noche, respectivamente, y la fiesta continuaría a su conclusión con la celebración de bailes.

            Pese al enorme esfuerzo que se realizó para afrontar una tarea tan compleja en aquellos tiempos como era la de iluminar una superficie tan amplia, básicamente con multitud de bombillas repartidas por el perímetro, el resultado final pudo considerarse aceptable, si bien tanto los espectadores como los futbolistas señalarían a la conclusión la insuficiencia de los focos instalados, sobre todo en determinados lugares.

            Aunque lo deportivo estaba en un segundo plano, cabe decir que en el primero de los encuentros, pese al gran potencial que se le presumía a una Selección Vasca en la que figuraban nombres ilustres, destacando sobremanera el de «PICHICHI», el modesto R. Stadium de los ÓSCAR ÁLVAREZ, HURLÉ, MARISCAL, JULIO ALONSO, CAMPOMANES, EGOCHEAGA, BARRIL o MEDINA, con quienes jugaba entonces y por escasas semanas (las de su estancia en la capital del Principado por motivos laborales, al ser destinado por el cuerpo de Contabilidad de Hacienda) SANTIAGO BERNABÉU, derrotó a los vascos por un contundente 4-1 (4-0 al descanso).

            Dos días más tarde, pese a los mayores recursos económicos de que disfrutaba el Deportivo, lo que le permitía fichar jugadores forasteros con mayor nivel (aunque la Federación Asturiana no le permitía contar con muchos de ellos en aquellas fechas por considerarles profesionales) y de que fue reforzado para este partido por dos integrantes del Stadium Avilesino (LISARDO y «CHON»), el marcador final del encuentro sería un contundente 0-5 favorable a los forasteros (0-1 en la primera mitad). Los locales no podrían anotar ni desde el punto de penalty, al errar «POLOLO» el señalado por el árbitro a favor de los ovetenses. Por cierto que, aprovechando su estancia en la capital, tras jugar el primero con el equipo stadiumnista al que perteneció por unas semanas, ejerció como colegiado en este segundo encuentro el mismísimo SANTIAGO BERNABÉU.