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LA COPA DE LA LIGA

Copa de la Liga

            Corría el año 1982 cuando se instauró en España una tercera competición, añadida a los tradicionales campeonatos de Liga y Copa, a imagen y semejanza de otros paises como Inglaterra. El principal objetivo era obtener unos ingresos que aliviasen las depauperadas economías de los clubes. Su nombre, el mismo que en las islas británicas, la Copa de la Liga.

            Se celebrarían, bajo el sistema de eliminatorias a doble partido, hasta cuatro torneos distintos, uno por categoría, siendo el premio para el vencedor en el torneo de los equipos de 1ª división una plaza para participar a la temporada siguiente en la Copa de la U.E.F.A. y para los campeones de la competición en 2ª división "A" y en 2ª división "B", el participar en la siguiente edición con los de la categoría superior.

            El fracaso iba a resultar sonado. Desde la primera edición en la temporada 1982/83, la falta de arraigo, el hecho de que se disputase al concluir la Liga y el escaso premio que otorgaba, hicieron que el objetivo no se cubriese ni de lejos. Se disputaron cuatro ediciones y tras la de la temporada 1985/86 desapareció con bastante más pena que gloria.

            Como militante en la 2ª división en aquellos años, el Real Oviedo disputó la Copa de la Liga de esta categoría. Tras una más que discreta participación en las dos primeras ediciones, en la temporada 1984/85, inesperadamente, se alzaría con el título.

            La Liga había concluido de manera angustiosa salvando la categoría in extremis en el último partido tras empatar en casa frente al Deportivo de la Coruña (1-1) y verse beneficiado por otros resultados. Cuando se jugó la primera eliminatoria, que había emparejado a los azules contra la U.D. Salamanca, el malestar de la afición por la mala temporada realizada no hacía presagiar nada bueno en una competición que se vivía con gran desinterés. Pero se venció 1-0 en Oviedo y se repitió triunfo en Salamanca (2-3).

            Casi sin querer se eliminó también en segunda ronda al filial del Athletic de Bilbao con cierta facilidad (2-0 en el Tartiere en la ida y nueva victoria oviedista por 1-2 en la devolución de visita en tierras bilbaínas).

            En 1/4 de final el Oviedo quedó emparejado con el Lorca, que pocos meses antes había caído derrotado en el Carlos Tartiere en el enfrentamiento liguero por un escandaloso 8-0. Esta vez otra goleada subiría al marcador: 7-2 en el Tartiere (10-4 en el global de la eliminatoria al vencer también en Lorca 2-3) con el consiguiente paso a semifinales, donde esperaba el Sabadell.

            En la Nova Creu Alta de Sabadell los carbayones lograrían empatar a un gol, ganándose el pase a la final en el partido de vuelta al imponerse por 3-1, confirmando la sorprendente solvencia en el torneo.

            La sensación de alcanzar una final en un torneo del KO produjo cierta extrañeza en la afición. Por un lado era un torneo considerado menor, pero por otro era un torneo oficial y la entidad no conocía lo que era obtener un título (si no consideramos como tal la Copa Consolación ganada en 1928 justo antes de instaurarse la Liga).

            El rival, otro filial, el At. Madrileño (que ya sabía lo que era ganar una Copa de la Liga). El 1-0 del partido de ida disputado en Oviedo con gol de GARCÍA BARRERO dejó las espadas en todo lo alto para la vuelta a disputar en el Vicente Calderón. «VITI», «JUANITO», EIZMENDI, HERRERO, «VILI», «BERTO», BLANCO, ARIAS, GARCÍA BARRERO, HEVIA y HERRERA fue la alineación que dispuso el entrenador Jose Luis Romero. El hijo del mítico «FALÍN», Santiago GARCÍA BARRERO volvería a marcar adelantando a los oviedistas en la primera parte empatando los madrileños tras la reanudación. El 1-1 final dio el título a los azules en un partido donde también jugaron CÁRDENO y MUÑOZ.

 
G. Barrero
recepción municipal
 
García Barrero tras marcar el 0-1 en la vuelta de la final
J.M. Bango con el trofeo en el ayuntamiento ante la mirada de "Herrerita"
 
posando con la copa
 
los protagonistas posando con el trofeo
 

            En la temporada 1985/86, la última en que se disputaría esta competición, el Real Oviedo entró en el bombo con los equipos de 1ª división, al ser el vigente campeón de la Copa de la Liga de 2ª, quedando emparejado en la primera ronda con el Racing de Santander, a quien eliminaría tras una tanda de penalties (3-0 para el local fue el resultado en ambos partidos) y en segunda con la Real Sociedad, que eliminaría a los asturianos (2-1 en Oviedo y 4-0 en San Sebastián).

 
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